Bosquejo Temático: El Fruto del Espíritu Santo
#1 Amor
El amor, fruto del Espíritu Santo, es la benevolente preocupación de Dios por la humanidad. La comunión devota del hombre hacia Dios. El sentimiento de benevolencia y hermandad que la gente debería de tener unos por otros.
Sabemos que «…el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado» (Romanos 5:5). «Dios es amor», razón por la cual si nosotros tenemos el Espíritu de Dios en nuestras vidas, debemos de producir el amor como parte del fruto del Espíritu Santo.
El amor llega a ser tan intenso que el apóstol Pablo llega a expresar que «…ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios» (Romanos 8:39). (También es importante leer 1 Corintios 13:1-13 donde se nos habla de lo que es el amor)
#2 Gozo
El gozo, fruto del Espíritu Santo, un sentimiento de regocijo muy agradable, felicidad gran placer o deleite. La causa de gozo y felicidad. La expresión de este sentimiento.
Cuando hemos conocido a Jesucristo y hemos sido llenos de su presencia, este gozo emana en nuestras vidas como cristianos, podemos mostrar en nosotros el fruto del Espíritu Santo y experimentar este gozo a pesar de los problemas, dificultades, adversidades, tribulaciones, conflictos, pues el gozo del Señor es nuestra fortaleza (Nehemías 8:10).
El salmista dijo que en la presencia de Dios hay «plenitud de gozo» (Salmo 16:11), por tal razón, nos alegramos «…con gozo inefable y glorioso» (1 Pedro 1:8).
Jesucristo quería que su gozo esté en nosotros y que nuestro gozo sea cumplido (Juan 15:11). También recordemos que el reino de Dios es «…gozo en el Espíritu Santo» (Romanos 14:17).
#3 Paz
Libertad de la guerra o luchas civiles. Calma, quietud y tranquilidad. Un estado mental sin turbación, ausencia de conflicto mental y serenidad.
Es importante tener en nuestra mente que la paz no es ausencia de guerra, sin embargo, se puede sentir una paz interna en medio de situaciones violentas como los tiempos de guerra.
El reino de Dios es «…Paz…en el Espíritu Santo» (Romanos 14:17), siendo Jesucristo nuestro príncipe de paz (Isaías 9:6) y la paz perfecta puede estar en aquellos cuyos corazones están puestos en él (Isaías 26:3)
También tenga en mente estos versículos Salmo 119:165; Santiago 3:17-18; Romanos 8:6; Hebreos 12:11. Cada uno de ellos nos habla sobre el fruto de la paz producida por el Espíritu Santo en nuestras vidas, el cual es parte del fruto del Espíritu Santo.
#4 Paciencia
Paciencia, fruto del Espíritu Santo, soportar injurias, insultos, problemas por mucho tiempo; paciente, que no es provocado fácilmente. Larga y paciente resistencia de injurias, insultos, problemas.
Algunos textos a considerar sobre la paciencia. como parte del fruto del Espíritu Santo, son los siguientes:
1) Dios es paciente con nosotros (2 Pedro 3:9,15), siendo este un ejemplo de cómo debemos ser de pacientes para con lo demás.
2) La predicación y la exhortación de los ministros debe ser administrada con paciencia según 2 Timoteo 4:2.
#5 Benignidad
La benignidad como parte del fruto del Espíritu Santo es la cualidad de ser amable, apacible, tierno y suave.
Una disposición para ser gentil, hablar suave, amable, de temperamento templado, culto y refinado de carácter y conducta.
Es importante notar que la sabiduría de lo alto es benigna (Santiago 3:17) y que David sintió que la benignidad de Dios lo había engrandecido (Salmo 18:35; 2 Samuel 22:36); así como también, que Pablo utilizó la benignidad para aplelar a los Corintios (2 Corintios 10:1), motivo por el cual los ministros deben mostrar benignidad (Tito 3:2; 2 Timoteo 2:24; 1 Tesalonicenses 2:7).
La benignidad es un interés sincero en los demás que se manifiesta en el deseo por tratarlos con amabilidad tal como el Señor lo hizo.
#6 Bondad
La bondad es parte del fruto del Espíritu Santo, y es el estado de calidad de ser bueno, específicamente virtud, excelencia, amabilidad, generosidad, y benevolencia. Excelencia moral y espiritual que se manifiesta en la iniciativa para emprender actos de bondad.
Dios manda a los creyentes a ser bondadosos para ser ejemplo a los demás (Gálatas 6:10). Ezequías y Josías nos dan ejemplos de bondad (2 Crónicas 32:32; 35:26). Recordemos que las recompensas se darán a los buenos y fieles (Mateo 25:21
#7 Fe
Creencia incuestionable, confianza completa, confidencia o dependencia. Se refiere a conducirse como una persona leal y digna de confianza, por lo que también se traduce como fidelidad. Recordemos también que «sin fe es imposible agradar a Dios» (Hebreos 11:6)
#8 Mansedumbre
Paciente y moderado, no inclinado a la ira o al resentimiento, domablemente sumiso o fácil de imponérsele.
La disposición de ser gentil, amable, bien balanceado en temperamento y pasiones, paciente en sufrir injurias sin sentir un espíritu de revancha.
Es una actitud de humildad y amabilidad que se somete con paciencia a pesar de la ofensa, sin deseo alguno de venganza o retribución. En el nuevo testamento se emplea para describir tres actitudes:
Sumisión a la voluntad de Dios (Colosenses 3:12), disposición a ser enseñados (Santiago 1:21) y consideración de los demás (Efesios 4:2).
La mansedumbre, fruto del Espíritu Santo, debe ser parte de nuestra vida cristiana
La mansedumbre debe ser parte de nuestra vida cristiana, a continuación ejemplos de mansedumbre descritas en la Biblia:
1) Moisés es sin duda un gran ejemplo de mansedumbre (Números 12:3)
2.) Debemos dar con mansedumbre las respuestas concernientes a la esperanza que hay en nosotros sobre la salvación (1 Pedro 3:15)
3) La Biblia dice que los mansos heredarán la tierra (Mateo 5:5; Salmo 37:11)
4) Restauran en un espíritu de mansedumbre a los hermanos que hayan caído en una falta (Gálatas 6:1)
5) Hay que recibir la palabra de nuestro Dios con mansedumbre (Santiago 1:21)
6) La mansedumbre debe ser seguida por los santos (1 Timoteo 6:11)
#9 Templanza
También se conoce como dominio propio y se refiere a la restricción de las pasiones y apetitos (1 Corintios 9:25; 2 Pedro 1: 5-6).
Es el estado o cualidad de ser templado, auto-controlado en conducta, expresión, indulgencia de los apetitos; moderación.
Debemos añadir templanza a nuestra fe (2 Pedro 1:6). De igual forma se le requiere a un obispo ser templado o con dominio propio (Tito 1:7-8). El dominio propio nos ayudará a establecer un equilibrio o balance en nuestras vidas.
Comentarios
Publicar un comentario